La higiene diaria es una práctica
precisa para todos, ya que esto garantiza la subsistencia de tener una salud apropiada
pero además, colabora en conservar buenas relaciones sociales y laborales.
Casi todas las personas hemos experimentado un momento desagradable y vergonzoso por un mal olor en las axilas ya sean por razones de higiene (baño
inadecuado, desodorante incorrecto, etc) u otros motivos.
Destaco que el sudor es un líquido sin olor, el mal
olor desagradable que sentimos es provocado por microorganismos que aprovechan
diversas situaciones de descontrol en la sudoración que más adelante se platea,
dichos microorganismos se encuentran en ambientes húmedos, calientes y ocultos.
Entre otros motivos que suelen producir mal olor en las
axilas destacan los siguientes:
- Estar expuestos
al calor.
- El miedo, el estrés y los nervios, pues en ocasiones nos
encontramos en situaciones difíciles que inducen en la sudoración de
manera no controlada y esto hace que la acumulación de humedad provoque
mal olor.
- Enfermedades de origen metabólico (diabetes, hemocromatismos,
hiperparatiroidismo).
Cada uno de estos motivos incitan al mal
funcionamiento de las glándulas sudoríparas y en ese momento es cuando surgen
los malos olores, es por ello que es de mucha importancia saber escoger un
producto que sea apto para cubrir las necesidades del día a día y tomar en
consideración si hacen falta medidas de higiene adicionales para mitigar y/o
evitar estos momentos desagradables.
¿Se puede evitar el mal olor en las
axilas con remedio casero?
La respuesta es sí, el mal olor se puede evitar
aplicando diferentes técnicas:
- Aseo diario con jabón antiséptico.
- No usar la misma ropa todos los días (cambiarla cada día).
- Tomar al menos 2 litros de agua cada día.
- Utiliza un desodorante que esté acorde a tus necesidades físicas
(ejemplo: cobertura para 24 horas, etc).
¿Cómo quitar el mal olor de las axilas
de manera natural?
Existen varias técnicas naturales y/o caseras que
ayudan a combatir o inclusive a eliminar los malos olores en casa, a
continuación una muestra:
Bicarbonato con limón:
El bicarbonato es un producto excepcional no solo para
usar en la cocina, pues está comprobado que su uso personal es igualmente
interesante, si lo combinas con el limón tendrás resultados sorprendentemente
rápido en la eliminación de malos olores:
- Lava las axilas con jabón y agua al ambiente.
- Dejar secar completamente sin dejar ninguna humedad.
- En la palma de la mano colocar un buen poco de bicarbonato, luego
colocar jugo de limón y remover (puede ser con los dedos o cualquier
utensilio a su gusto hasta que se cree una pasta uniforme), colocar
inmediatamente en las axilas masajeando suavemente.
Este producto puede dejarlo actuar durante diez o
quince minutos, luego retirar con abundante agua, repetir el mismo proceso
durante una semana seguida, luego ir disminuyendo las sesiones a tres veces por
semanas y posteriormente una vez a la semana según lo considere necesario.
Leche de magnesia:
Los resultados obtenidos con las propiedades de la
leche de Magnesia han hecho que todos quieran probarla para aprovechar sus
beneficios, y lo mejor de todo es que está al alcance de todos, sus propiedades
favorecen en la eliminación de la grasa y la humedad excesiva.
Pasos
a seguir:
- En el bote que contiene la leche puedes agregar varias gotitas de
aceite esencial de tu preferencia.
- Mezcla bien el tratamiento antes de usar.
- Lava bien tus axilas con abundante agua y jabón.
- Seca completamente y procede a colocar un poco de la leche de Magnesia
masajeando suavemente la zona de las axilas (se puede colocar con la palma
de la mano u otro artefacto de su preferencia, ej. algodón).
Este tratamiento puedes utilizar todos los días
durante una semana antes de acostarte, al levantarte te lo retiras con
abundante agua y jabón.
Otros métodos que pueden ayudar:
- Ejercicios.
- Dieta balanceada sin condimentos
excesivos.
- Visitar a un especialista del
área (dermatología).
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